Balcón Trianero

lunes, 14 de julio de 2014

Prohibicion de la Velá


"Vista del Rio en el acto de jugarse la Cucaña
de Santiago y Santa Ana del año 1,742"
Se habían hecho ya muy notables los excesos de la que llamamos veladas,
nombre derivado de las vigilias nocturnas que en honor de los santos los
santos celebraban los fieles las vísperas de sus festividades; entre otras
era muy célebre la Santa Ana en Triana, a quedaba más libertad el
despoblado Arenal y orilla del rio, lugar de la concurrencia; y deseando
evitar en cuanto se pudiera los desordenes, que la obscuridad de la noche
no podía ocultar, el celoso Coadministrador las prohibió generalmente por
su edicto de 24 de julio, a quien auxilió el Asistente con su autoridad,
mandando publicar otro con la misma prohibición e imposición de penas “.
M.Mediano Vargas
J.Matute y Gaviria. Anales Eclesiásticos y seculares.
Foto grabado: Juego de la cucaña. 1852. Universidad de Sevilla

4 comentarios:

  1. Como dijo el torero, "El Gallo", -"Hay gente pá tó".
    ¡Mira que prohíbir la Velá más señera de Sevilla!

    Estupenda curiosidad trianera, y fotografía de antaño.

    Amistosamente.

    Mari Carmen.

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  2. Ahí está la historia, que al extrapolarla el estimado lector Manuel Mediano Vargas, facilita el conocer una singularidad de la Velá más universal.
    La cucaña, quizás le falta la presencia de la mujer a la hora de abrirse paso en la “pasarela acuática”, ya se hizo en contadas ocasiones y el resultado fue positivo y bello.
    A falta de poco días en que se suba al palo de la cucaña, nos trae él recuerdo de Juan Carmona, conocido por “él Perdigón” tio de Juan Andana que cogió el testigo de aquellas andaduras entre sebos y el contacto de las aguas “mas grandes”.
    La cucaña es antiquísima, cuando los barcos que hacían viaje a las indias, celebraban con toda pompa esta fiestas, situando en cada “mástil horizontal” tanto en su proa como poca con un doblón de oro y que desde la publicación de la Gramática castellana de Nebrija en 1492 hasta la muerte de Calderón en 1681, creemos que estos personajes, que algo sabían de esta muestra ribereña.

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  3. Existen dos libros sobre la historia de la Velá escritos recientemente por un trianero donde vienen todas estas noticias comentadas y centradas en la Triana de la época. Y además con una ingente colección de ilustraciones.

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    1. Reconocido Ángel, por asomarte a la baranda a este B.T., en el cual siempre distinguiremos con el mejor sitio; para informar o dar “lecciones de cátedra” sobre el barrio más universal. Triana.
      Hace unos días que salimos a “cubrir la noticia” y a la vuelta llega a este terminal, las ponderadas palabras escritas de quien conoce las interioridades de la Velá a través de los años; de ahí que su dedicación haya sido constante en esta “fiesta, que debe estar entre las cinco más antiguas de España”.
      Espera B.T., encuentre el lector entre las obras flamencas citadas, a esa Velá “orientada hacia la recuperación de su identidad: una fiesta donde se vea y suene a Triana” y que el trianero y amante del barrio de respuesta a esta festividad con esa pregunta que se hace su autor sobre Triana:“¿o es que no ha tenido identidad propia este costado de Sevilla?”.

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