Balcón Trianero

domingo, 3 de mayo de 2015

Mi Madre.¡Allá donde está!

Mi Madre.¡Allá donde está!

Tus manos fueron mi caricia 
mis acordes cotidianos 

te quiero porque tus manos 

trabajaron por la justicia. 
Si te quiero es porque fuiste
mi amor mi cómplice y todo 
y en la calle codo a codo 
fuimos mucho más que dos.

Tus ojos eran mi conjuro 
contra la mala jornada 
te quise por tu mirada 
que miró y sembró futuro.

Tu boca fue tuya y mía 
tu boca no se equivocaba 
te quiero porque tu boca 
supo el ser sintonia. 

Si te quiero porque las manos
fueron amor mi cómplice y todo 
y en la calle codo a codo 
fuimos mucho más que dos. 

Y por tu rostro sincero 
y tu paso vagabundo 
y tu llanto por el mundo 
porque fuiste pueblo te quiero. 

Y porque amor no es aureola 
ni inocente moraleja 
y porque fuimos familia 
y sabía que no estabas sola. 

Te quiero en mi paraíso 
es decir que en mi raíz 
la familia viva feliz 
aunque no tenga permiso. 

Si te quiero es porque fuimos 
mi amor mi cómplice y todo 
y en la calle codo a codo 
éramos mucho más que dos.

2 comentarios:

  1. ¡¡¡Precioso y muy sentido!!!
    No conozco cariño más grande, desprendido e incombustible que el que nos entrega la mami, mucho antes de nacer...
    Afectuosamente.

    Mari Carmen

    ResponderEliminar
  2. Mari Carmen: No será él que suscribe, de dar "clases" del amor materno de las mujeres; menos, cuando quien así lo reconoce, imparte esa muestra diariamente sobre su descendencia y ha tenido a gala de comprobar este apego en multitud de madres.
    Ya se sabe que las madres sufren amando a sus hijos y ello es la única forma de vivir con dignidad.
    Respetuosamente un saludo.

    ResponderEliminar